En un país en la que casi todos tenemos algo de sangre indígena, parecería lógico sacar una medida así: (Todos los funcionarios públicos deben hablar un idioma nativo para estar habilitado en su cargo) ¿SE CUMPLE?, Pues no, pasa que el resultado es un montón de empleados públicos que tienen un certificado de haber realizado algún curso de idioma nativo, pero que en la práctica casi ninguno lo habla.
HACER QUE EN EL SISTEMA EDUCATIVO PRIMARIO Y SECUNDARIO "IDIOMAS" SEAN MATERIAS TRONCALES es lo que se debió hacer, es decir que un bachiller salga hablando un idioma extranjero y uno nativo a un nivel superior, inglés y quechua por ejemplo. Y si bien en papeles esta idea está inmersa en la filosofía educativa del país, la realidad sigue siendo la misma por lo que nuestros bachilleres siguen saliendo con la capacidad de solo saludar en otros idiomas, pero lejísimos de hablarlo lo suficientemente bien como para ser útil en algo en el mundo real.
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